Exactamente Esa Presencia

Detenerme y escuchar el viento mover las ramas de mi conciencia me hacen recordar los sueños que he tenido; llenos de ilusiones, fantasías, melancolía y tristeza.

Sueños que he construido con el pasar de estos años lleno de piedras en mi camino.

Detenerme y mirar al cielo, con su escenario de nubes blancas espumosas, armando la figura perfecta de tu silueta, esperando por alguna señal de tu sonrisa para continuar mi recorrido...

Detenerme y sentir un abrazo tan lleno de tu fragancia que embriaga mi alma y le da vida, hace recordar el sentimiento más profundo jamás sentido.

Detenerme, mirarte… Sentirte... Hacen que mi destino caiga sin gravedad a mis pies para inmortalizar el momento que te tuve en mis brazos.

Detenerme y contemplar exactamente tu presencia hacen que reviva en el mundo que nunca he vivido, con pensamientos que no son míos, con manos que no conocen el recorrido de las palabras que transitan mi subconsciente, con ojos que sólo se conforman con ser esferas que miran por inercia...

Detenerme y pensar que exactamente viviré con tu presencia me hacen morir en el intento de despertar de este sueño infinito, de tener ganas del mundo que se aproxima, de simplemente tener ánimos. Contigo, despertar y regresar a la realidad.