lunes, 7 de junio de 2010

Sin Destino

Di que mi nombre fue una palabra que nunca se escuchó, que nadie pronunció, una palabra que no tuvo sentido.

Porque eso ha sido mi nombre con la ausencia de tus labios, de tu voz.

Di que mi existencia fue una ilusión no pensada, una burla triste y gris, que fue un intento de desafío que nadie intentó.

Que fui un fantasma que tembló de miedo ante los fantasmas que daban miedo.

Di que fui un deseo jamás deseado, que me quedé en el país de los nadie, recorriendo las veredas que no existieron y que nadie recorrió. Porque si no logré encontrarte mis pies nunca andaron.

Di que no tuve alma, que no quice tenerla, que la obligué a huir porque me estorbaba sin ti...

Di que no tuve destino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario